Wilfredo Oseguera, un periodista para los nuevos tiempos

¿Cómo es un día normal en tu vida?

Inicio a las 6:00 am ya que doy clases en la universidad hasta las 8:00 am. La carga de trabajo es grande, pero impartir cátedra me relaja, ese espacio para compartir el conocimiento y la experiencia que Dios y la vida me ha dado a través de todos los puestos de trabajo que he tenido me inspira a seguir trabajando, a seguir luchando. Luego inicio una jornada de trabajo como Gerente Nacional de Mercadeo de una Institución de educación superior, de igual manera trabajo en diferentes proyectos de relaciones públicas, como consultor nacional e internacional, estas labores me abarcan 24/7 sin dejar atrás el proyecto, el cual siento que va por muy buen camino: 50 MINUTOS HN.

Al interactuar con tantas personas y conversar con colegas y periodistas hacen que afinen la producción de cada edición del programa, un proyecto que va caminando a pasos agigantados, en televisión, radio y ahora en prensa digital con el lanzamiento de mi página web. Asimiso paso pendiente de cualquier tipo de necesidad que se puede suscitar en el Colegio de Periodistas de Honduras del cual me honro ser miembro de la Junta Directiva en el puesto de tesorero. Los fines de semana estudio la carrera de Derecho porque creo que a todo ciudadano le es imperativo conocer y en buena medida entender las leyes que existen en su país de residencia y más aún si es periodista es un deber conocer la estructura jurídica que sienta las bases del funcionamiento y que forja el futuro de las sociedades.

Te mueves en diversos escenarios que requieren distintas habilidades, ¿qué opinas del periodismo tradicional? ¿Cómo crees que lo ha cambiado el home office generado por la pandemia?

Todos las profesiones se han reinventado a partir de la pandemia. Los periodistas y comunicadores vimos la manera de obtener la información prácticamente de cualquier forma (agotando todas las instancias pertinentes), pero nunca paramos de llevar hasta los hogares de los hondureños y del mundo entero noticias de último momento, debates, temas de opinión y sobre todo coberturas de lo que están viviendo nuestros pueblos por el Covid-19.

El periodismo cambió para nunca volver a ser igual, nuevas formas de reportear, asimismo las formas de editar y de publicar información, en un mundo totalmente diferente, nuevas audiencias que hay que satisfacer, la información que se creía que podía impactar ahora no causa ni suspiros, hemos visto un mundo diferente a partir de esta época, hemos utilizado muchas herramientas nuevas que llegan a audiencias nuevas, a televidentes, radioescuchas y lectores que nunca habíamos pensado llegar.

Valorando todos los factores que han incidido y que han obligado a hacer cambios radicales. Esto nos posiciona en una nueva forma de hacer periodismo, nos invita a desafiarnos como creadores y creativos en el procesamiento y transmisión de la información, en fin, hablar contigo de periodismo, no vamos a terminar hoy. Hahahaha!

¿Qué recomiendas a los nuevos periodistas que recién salen de las aulas universitarias, cómo crees que podrían destacar en una era tan compleja?

Las comunicaciones en Honduras y el mundo han cambiado, esperamos una nueva generación de homólogos que pueda trabajar con completa autonomía. El periodista tiene la necesidad de salir a la calle, recoger información, valorarla, interpretarla, regresar al medio para editarla él mismo y finalmente publicarla.

Honduras y el mundo esperan una nueva generación de periodistas que no pierda el rumbo del comunicador: servir a una sociedad. El periodismo es una carrera de servicio, apegada totalmente a valores, en pro de la familia, en defensa a los Derechos Humanos, a respetar al individuo y la persona natural o jurídica.

Honduras necesita más periodistas comprometidos con el pueblo, con su necesidad, encaminado fielmente a educar más que a entretener, el pueblo necesita Información confiable, que sea educativa, que forme carácter y genere opinión apegada siempre a la verdad, a la objetividad y a las buenas costumbres.

Este cúmulo de requerimientos son los que podrán marcar a la nueva generación de periodistas hondureños, pienso en nuestro gran estandarte en el Colegio de Periodistas de Honduras: álvaro Contreras, y de manera internacional la ideología de Gabriel García Márquez; les invito a leer sus biografías al igual que sus obras literarias.

Ya hace algunos años nos conocimos en las oficinas de Grupo Opsa, uno de los lugares que marcó su trayectoria como comunicador. Ese fue uno de sus primeros centros de trabajo y también un lugar donde comenzaba a perfilarse su futuro y a soñar en grande. La producción de revistas para diario La Prensa y El Heraldo no sería su única función ya que pronto vimos a Wilfredo en proyectos de de RSE y en actividades de mercadeo de títulos de revistas.

El tiempo y esas ganas infinitas de aprender y formarse más y más lo llevarían a nuevos retos como catedrático en la Universidad Metropolitana de Honduras, director y productor de "Consejo, Inspiración y Victoria" (programa en vivo); productor de "antesala." 30", programa semanal de noticias y más recientemente adicionaría a sus cargos el de director de noticiero y presentador de noticias Mayavisión Canal 50.

El tiempo no se detiene y sus ganas de aprender y crecer tampoco. Por eso lo vemos activo, como tesorero actual de la Junta Directiva del CPH y también como director de la Organización Mundial de Periodistas de Honduras.

Wilfredo siempre está ocupado en algo, gestando o empujando un proyecto, soñando con algo nuevo, es su adrenalina, lo que lo mueve cada día.

¿Tus primeros trabajos en el mundo del periodismo? ¿Qué temática era tu favorita?

Cada una de las experiencias vividas dentro del mundo periodístico me han forjado, de tal forma que representan lo que soy hoy en lo pertinente; una persona sencilla, llena de valores, quien medita cada día que pasa lo que va a hacer, haber cursado por casi 10 años como periodista, editor y jefe de redacción en Diario La Prensa y El Heraldo fue una gran escuela para mí, agradezco tanto el acompañamiento como los conocimientos y enseñanzas que me dio en ese proceso de formación quien fuera mi jefa en ese momento y ahora mi gran amiga Tania Nuila Sabillón, y cabe mencionar que hubo colegas que me enseñaron tanto: en la radio puedo mencionar a Francisco Hernández Umanzor, que de hecho fue mi primer jefe cuando participé en un proceso electoral como periodista de Radio América; en el ámbito de las Relaciones Públicas y Gestión de Medios le debo mucho aporte a colegas como Marlen Zelaya, quien fue mi catedrática cuando estudié periodismo, también a Suyapa Barrientos, ya que me ha apoyado mucho en este fascinante y retador ámbito. De igual manera, el Ph.D. Kevin Mejía por siempre ver en mi potencial como Consultor Internacional; al licenciado Miguel Ledhesma porque me ha dado la oportunidad desde 2015 hasta hoy de ser Director para Honduras de la Organización Mundial de Periodistas y Profesionales del Turismo.

Como catedrático también he aprendido mucho y volver a incursionar en la televisión y radio después de tantos años en la prensa escrita me ha convertido en una persona más humilde, que aprende a escuchar a los demás, y que puede entender la necesidad del pueblo.

Todos los cargos y colaboraciones que he ejercido durante el trayecto de esta noble y retadora carrera del periodismo, me han fascinado, de tal manera que me han forjado para ser lo que hoy en día soy, influyendo directamente en mi estilo de trabajo y apegado en todo lo que hago.

¿Expectativas versus realidad luego de comenzar tu carrera?

Cuando uno es joven piensa que puede conquistar el mundo, que al ganar más dinero en esta carrera puede llegar a tener poder, y la verdad no es así, no es por dinero, es por pasión a lo que se hace, es por servir a una sociedad, entonces se comprende que ese es el verdadero periodismo, el haber pasado todas las facetas que un periodista puede experimentar, te hace ser más humano, apegado a las necesidades de la audiencia.

A veces cuando se es joven y no se tiene experiencia, podrías llegar a pensar que puedes pasar por encima de todos con tal de conseguir lo que deseas, pero no es así, la familia, la amistad y los valores valen más que cualquier cuota de poder al igual que cualquier cantidad de dinero.

¿La noticia más difícil que has cubierto?

Recuerdo una vez que realicé una serie de reportajes en una comunidad, allá en el interior de nuestra bella Honduras: específicamente en La Unión, Lempira. Tener que realizar un reportaje de un grupo de niños tan pero tan pobres quienes en sus casas les daban de almorzar tortilla recién hecha con una especie de zacate hervido y un poco de sal, y a pesar de todas las adversidades que te podrás imaginar, estarían pasando, se podía notar el espíritu de superación que emergía de estos pequeños. Ya que estos tenían todas las aptitudes para poder estudiar una educación y bilingüe, recuerdo que asistían a un proyecto patrocinado por una entidad privada.

A lo que quiero llegar es: que dolor más grande ver la realidad de mi país en aquel entonces, esa fue una de las coberturas que más me han conmovido. Luego de la publicación de ese reportaje conseguimos patrocinadores para el apoyo de estos niños, actualmente ya son jóvenes adultos que estudian en universidades de prestigio tanto en lo interno de Honduras como en el exterior.

¿Cuál es tu papel como director de la Organización Mundial de Periodistas de Honduras?

Este puesto me da la oportunidad de ayudar y apoyar a muchos periodistas y comunicadores de mi país a seguir capacitándose en diferentes tópicos pero sobre todo en la especialización de nuevos periodistas expertos en turismo que aborden temas en pro del desarrollo de los pueblos, hemos podido llevar a otros países de Sur y Norte América a colegas hondureños a compartir experiencias con más de 200 periodistas que nos reunimos para tener capacitaciones que aborden temas regionales y que conformados todos podemos hacer un mejor periodismo.

Este año, a pesar de la pandemia y siempre tomando todas las medidas de bioseguridad, estimando que los presentes hayan sido inoculados; nos reuniremos la primera semana de septiembre en Cancún, México para tratar temas de periodismo en medio de la COVID-19.

¿Qué cualidades crees que se debe tener para ser un buen periodista?

Humildad sobre todo, seguido de un carácter que proyecte el ejemplo de la humildad pero que se conjugue con la tenacidad y sentido crítico de acuerdo con las circunstancias, también el sentido de responsabilidad y respeto, un poco de astucia para no dejarse impresionar por cualquier cosa, 100% de sensibilidad y sobre todo y por encima de cualquier cosa: Valores, todo tipo de Valores.

De todas las áreas del periodismo, ¿cuál es tu favorita? ¿Y la que menos te gusta?

Es difícil decidir, a un apasionado del periodismo le es muy difícil decidir, pero me gusta mucho la prensa escrita, la tv, la radio, las relaciones públicas y la gestión de medios. En el espectro que cubre la rama periodística, es difícil determinar que no le gusta a uno, ya que en más de una ocasión te tocará ejercer dicha evasión y se estará agradecido por saber cómo manejarla y superarla.

¿Tu autor favorito?

Gabriel García Márquez

¿Un libro que le impactó?

Lo que vi, del homólogo mexicano Jorge Ramos.

Lo que más te enorgullece de tu carrera...

Poder servir a los demás.

A dónde quisieras llegar...

Tener un proyecto grande de Comunicación: Poder desarrollar la marca 50 MINUTOS HN en diferentes plataformas de comunicación.

Lo más difícil que has logrado hasta ahora...

Es difícil de contestar, todo en la vida cuesta, y cuesta mucho.

Y lo más gratificante...

Tener a mis padres con vida, hermosos y sanos, eso es lo más grande que Dios me pudo dar.

Tu mayor aprendizaje en la pandemia...

La responsabilidad que tenemos como comunicadores en educar, creando cultura de organización y de razonamiento crítico de tal manera que se logre amortiguar el impacto de circunstancias como las generadas por el virus del COVID-19.

¿Un nuevo talento que hayas descubierto?

Cocinar, hahaha!

¿Cómo te relajas?

Ahora estando en casa, viendo una buena película o serie, antes viajar, pero el estar en tu casa con la persona que amas, es algo que no tiene precio y que nada del mundo puede igualar.