Rojo y blanco triunfan en la apuesta de Virginie Viard puesta en escena en Monte Carlo, “sabía que haríamos un show allí, precisamente en el Beach Hotel. Además, Karl soñab con eso. Desde este magnífico lugar, se puede vislumbrar su villa, La Vigie. Nunca olvidaré los momentos que pasé allí: terrazas y balcones, grandes sombrillas, cestas de flores, tanta belleza”, evoca la directora creativa de la firma.