Victoria lucía un delicado vestido columnar, de escote corazón y un delicado toque de brillo en la cintura que complementó con un largo velo bordado en encaje y un bouquet que incluía la foto de su recordada abuelita.
Tras darse el sí quiero, la pareja se trasladó en un Beetle descapotable de 1973 al Hotel Intercontinental, donde disfrutaron una celebración íntima, entre arreglos de lirios, rosas y hortensias.
Fue una fiesta pequeña y familiar pero llena de detalles y en la que no faltó la diversión. Luego del brindis, dieron paso a su primer baile como esposos al ritmo de 'Yo te propongo' de Armando Manzanero.