Gerardo Trejo echó a volar su imaginación y logró recrear un espectacular ambiente circense con una ecléctica fusión de elementos como carpas, telones en blanco, sombrillas, muebles antiguos, máquinas de pop corn y posters vintage del Ringling Brothers and Barnum & Bailey Circus. Ahí se reunieron todas las amigas de Ericka, que esa noche se transformaron con originales disfraces de diferentes personajes.
Mientras disfrutaban refrescantes pomegranate martinis y un exquisito menú a cargo del restaurante El Mezzonite, las invitadas presenciaron un colorido y fastuoso show de zancos, malabaristas, cómicos y enanos que las transportaron a un mágico circo.
La música de Jorge Torres amenizó la celebración en la que todas las invitadas apostaron por originales disfraces: desde mimos, arlequines y cigarette girls hasta personajes de películas y diversas interpretaciones de La Catrina. Ericka disfrutó al máximo cada minuto de esa fiesta memorable, en la que en lugar de regalos solicitó donaciones a la Fundación Puerta Abierta, que dirige el padre Mario Botet.