Antes de tener a Archie la ex actriz corría de forma diaria, aparte de ser una amante del Yoga, ya que su madre (ex profesora de la práctica) se lo inculcó desde pequeña. Fuentes cercanas a la familia real afirman que Meghan sale a correr de forma estricta todos los días de la semana. Lo hace en las zonas cercanas a su residencia para poder hacerlo de forma segura.
Además, los médicos le han dado el visto bueno para retornar a la práctica del Yoga, que tiene múltiples beneficios físicos y mentales, sobretodo en esta etapa post parto. Fuentes aseguran que la Duquesa no tiene 'apuros' en bajar todo el peso de forma rápida y que se lo está tomando 'con calma'.