A diario el menú de Trump se basa en los siguientes platillos:
* Desayuno, la comida más importante del día, para Trump, este paso carece de relevancia y prefiere saltarlo de su rutina, en caso de comer algo su elección tradicional son los huevos con tocino.
En términos generales, este sería un desayuno normal, sin embargo los nutricionistas y cardiólogos aseguran que este tipo de alimentos pueden aumentar los niveles de colesterol y enfermedades del corazón por lo tanto no es de los más acertados.
* El almuerzo, Donald es fanático de Mcdonald's, su segunda comida del día suele ir acompañada de una Big Mac, papas fritas y ketchup, para el las comidas rápidas son las que mantienen un nivel de higiene óptimo y garantizan el buen estado de los alimentos.
En una entrevista aseguró, 'Una hamburguesa en mal estado puede destruir un Mcdonald's', de ahí la confianza de comer en un lugar con los mejores controles sanitarios, según su opinión.
Cuando no come hamburguesas, disfruta de una deliciosa pizza, pero es importante mencionar que el magnate, para cuidar la línea remueve el pan de las hamburguesas y no come el borde de la pizza, además que sus comidas siempre van acompañadas de una soda de dieta.
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Según el mismo presidente de McDonald's Jan Fields, una Big Mac tiene unas 550 calorías y si hablamos de la pizza una porción contiene aproximadamente unas 170, que son desapercibidas por el republicano.
* Cena, por las noches el político disfruta comer pastas, patatas y según sus familiares básicamente todo lo que se le antoje en el momento, al parecer sus hábitos alimenticios, forman parte de la costumbre familiar de tener buen apetito y no restringir absolutamente nada, sobre todo por las noches.
Y en cuanto a las frutas y verduras, no son tan imprescindibles dentro de su cocina.
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