Los expertos dicen que al parecer Meghan realizó una serie de preguntas a el príncipe, quien parecía distraído con alguien que le platicaba, a lo que él respondió: 'Sí, así es', y luego atendió a su esposa Meghan, pidiéndole que le repitiera la pregunta, pero que mantuviera la mirada hacia el frente ya que los los fotógrafos aprovechan cualquier oportunidad de captar una mala toma.
Meghan inmediatamente se da cuenta de la situación y regresa la mirada hacia a el público, mientras trata de mantener la sonrisa.
Parte del protocolo Real es siempre tener la mirada puesta hacia el 'pueblo británico' ya que dar la espalda es considerado una ofensa.