Desde Rita Hayworth a Lady Gaga pasando por Diana de Gales y Julia Roberts. La historia más reciente está llena de vestidos inolvidables y Hal Rubenstein, uno de los 'gurús' de la moda de Estados Unidos, acaba de publicar un libro en el que repasa los cien vestidos más icónicos de los siglos XX y XXI.
Destaca el vestido que William Travilla creó para Marylin Monroe en La Tentación vive arriba o el traje rojo con el que Julia Roberts consiguió enamorar a Richard Gere -y a medio mundo- en Pretty Woman. Pero no solo el cine nos ha dejado vestidos de ensueño.
Las series de televisión también han contribuido a esta lista con vestidos tan impresionantes como el Versace que llevó Carrie Bradhaw (Sarah Jessica Parker) en la última temporada de Sexo en Nuevo York. O la realeza. Todo el mundo recuerda el vestido de novia de Diana de Gales y el que lució la duquesa de Cambridge 30 años después.