'Ser madre es, simplemente, el mayor logro de mi vida. Me ha aportado un inesperado viaje que constantemente me sorprende, me educa y me confunde. La conexión emocional que siento hacia mis hijos me proporciona una alegría sin límites, al mismo tiempo que las inevitables preocupaciones'.
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'Ellos son una maravilla cada día. De un hijo adolescente a una hija pequeña, cada momento de cada día está lleno de energías diferentes, actividades, sentimientos y mucha comedia. De hacer deporte a la holgazanería sobre el sofá, cada uno de mis niños me llena cada segundo de risa, de música y de conversaciones. Son amables y educados y sus mentes son increíblemente curiosas. Me siento bendecida por estar rodeada de estos seres humanos fenomenales'.
'Mi madre y mi padre siempre nos alentaron a mis hermanos y a mi a tener ambiciones, y espero que junto a su padre, pueda inspirarlos a soñar en grande y ser la mejor versión de sí mismos que puedan ser.'
'Al igual que muchas madres trabajadoras de todo el mundo, siento la lucha constante por ser la mejor madre, mientras les doy un buen ejemplo trabajando duro. Viajo por trabajo cuando es necesario, y les echo de menos todo el tiempo mientras estoy lejos. Pero ellos ocultan notas en mi maleta, que me encanta encontrar mientras desempaco, y siempre llevo conmigo fotografías de toda la familia y las coloco junto a mi cama para que sean lo primero que veo cuando me despierto y lo último que veo cuando me voy a dormir. Amo escuchar sus voces al teléfono y ver sus rostros, gracias a Dios por FaceTime. Esa sensación de sentirme conectada hace que estar separada sea un poco más fácil.'
'Siempre he creído que las mujeres deben apoyar a las mujeres. Mi admiración hacia aquellas mujeres que continuamente dejan de lado sus propias necesidades para anteponer las de sus niños, sorteando incertidumbres a diario y territorios desconocidos, pero que, a cambio, son recompensadas con la alegría y el amor sin fin'.
