El auge del coaching como alternativa para impulsar el potencial humano

En un reciente artículo publicado por la ICF, por sus siglas en inglés International Coach Federation, se estima que, si las estadísticas son correctas, desarrollar una cultura de coaching que abarque la salud mental es una necesidad imprescindible para la supervivencia profesional y personal en un panorama que cambia rápidamente a raíz de COVID-19. Esto ha hecho que surjan importantes replanteamientos en cuanto a la importancia y la naturaleza altamente eficaz del Coaching.

Un Coach puede habilitar significativamente el proceso al fomentar la auto-observación, la reflexión enfocada y la creación de sentido a través del entrenamiento. Un diferenciador útil del coaching es el enfoque en el futuro y en los resultados. Provocar y alentar la acción garantiza que las percepciones vayan más allá de los meros momentos de sabiduría.

Para esto hablamos en exclusiva con Juan Arnold, Coach Profesional y Director del Programa Radiant Coaches Academy para Latinoamérica, quien nos comparte cómo podemos aprender a gestionar la ansiedad en tiempos de crisis.

Juan Arnold, explícanos qué es la ansiedad y cómo se puede manejar a través del Coaching.

Bueno, en su uso cotidiano el término ansiedad puede significar un ánimo transitorio de tensión (sentimiento), un reflejo de la toma de conciencia de un peligro (miedo), un deseo intenso (anhelo), una respuesta fisiológica ante una demanda (estrés) y un estado de sufrimiento mórbido (trastorno de ansiedad).

En estos días, esa respuesta de miedo se ha apoderado de toda nuestra vida y se convierte en ansiedad.

Lo primero que debemos darnos cuenta al considerar la conquista de la ansiedad es el hecho de que sucede y nunca vamos a eliminarla por completo, porque es parte de nuestra condición humana. Lo que queremos hacer es aprender a domesticar a estos "pequeños monstruos ansiosos" para que podamos vivir con una confianza tranquila; primero debemos entender que fuimos diseñados para ver y lidiar con la negatividad. Nuestros cerebros son de teflón para pensamientos positivo y un velcro para pensamientos negativos.

Eso es realmente bueno y es por eso por lo que estamos aquí. La ansiedad no es miedo relacionado con un estrés físico inmediato. Es una preocupación crónica por las cosas que podrían suceder y nuestros antepasados no hacían eso.

Nuestros ancestros eran muy buenos para percibir amenazas en su entorno. La diferencia entre ellos y nosotros es que cuando ellos experimentaron miedo, que es una respuesta natural a un estrés inmediato, tuvieron la respuesta de luchar o huir que les ayudó a alejarse de lo que fuera que amenazaba su existencia física. En estos días, es como si toda la jungla nos rugiera y amenazara nuestras vidas todo el día, todos los días. Tenemos más estimulación en 10 días que nuestros antepasados tuvieron durante toda su vida.

Nuestros cerebros están recibiendo demasiada información que está generando ansiedad en niveles altos sin antes haberla padecido.

La cantidad de horas que las personas pasan viendo programas en la televisión están relacionadas con el nivel de ansiedad. Por ejemplo, si se ven las noticias de un atentado terrorista en la televisión, alrededor de cinco a seis horas, sumando otros medios publicando el mismo evento una y otra vez, se generará un estrés postraumático que podría ser comparado con las personas que fueron parte del evento que tendrán menos síntomas de trastorno de estrés postraumático.

¿Cómo el cerebro puede asociar esto?

Bueno, tu sistema límbico no puede diferenciar entre ellos. Se expone con esa dinámica, lo que tu mente puede ver y puede imaginar más vívidamente que te está pasando, lo que crea una mente más activa que produce ansiedad.

La vida es como un deporte. Puedes ser un atleta en el campo (viviendo tu vida) o un espectador (viendo tu vida). En cualquier deporte, los atletas se preparan para el juego y lo hacen bien (porque saben cómo lidiar con el estrés).

Los mejores atletas saben cómo lidiar con esto de manera sostenible, mientras que los fanáticos no tienen esa ansiedad y no tienen idea acerca del significado de lidiar con ello, ya que están abriendo su séptima cerveza y viendo el partido desde las gradas. Así que poniendo los deportes (que son increíbles) como ejemplo, porque queremos entretenernos al mirarlos, pero al mismo tiempo también queremos ser los atletas y protagonistas de nuestras vidas. Y eso requiere que aceptemos el sentimiento de ansiedad mientras creamos significado en las mismas.

¿Cuáles serían algunas recomendaciones para lidiar con la ansiedad?

La mejor forma de predecir la ansiedad es estar consciente en lo que ves y/o pones constantemente en tu mente.

Entonces, si queremos lidiar con la ansiedad de una manera efectiva, debemos hacerlo con dedicación y práctica. Tenemos que calmar nuestras mentes y calmar nuestro sistema nervioso continuamente. Las formas más poderosas en que podemos hacerlo son simplemente reduciendo la estimulación que experimentamos.