El protector solar es el producto anti-aging número 1. Al comprarlo comprueba que contenga dióxido de titanio, óxido de zinc y avobenzone para una mejor protección. En el verano asegúrate de utilizar un protector con una amplia protección, mínimo de 30.
02. De los pies a la cabeza
La cara, espalda y hombros son impor-tantes, pero ¿qué sucede con tus pies, codos, piernas, cuello y manos? Aplica el bloqueador como si fuera un vestido, en todas partes y en cantidad suficiente para que cubra de manera uniforme, sin dejar ninguna zona desprotegida.
03. La cantidad correcta
Sé generosa al momento de aplicar el protector. Debes usar al menos una onza en todo el cuerpo (el tamaño de una pelota de golf). Para el cuerpo se recomienda usar dos tubos de 100 ml durante los primeros 5 días de exposi-ción y para el rostro un tubo de 50 ml.
04. Aplica, una y otra vez
Con una vez que te apliques protector solar no será suficiente. Para mantener la eficiencia debes reaplicar el protector como máximo cada dos horas. Si te mojas o sudas, debes ser aún más estricta, aplicando cada vez que tu piel se humedezca demasiado. Al salir del agua, seca bien tu piel para evitar el "efecto lupa", ya que las gotas de agua favorecen la aparición de quemaduras solares.
05. Fíjate en la fecha
Una vez abierto el frasco, el SPF solo mantiene su eficiencia por 6 meses. Después de eso sus filtros no te prote-gen como se requiere. Así que no caigas en el error de usar un protector de tus últimas vacaciones ya que probable-mente haya permanecido baja altas temperaturas y haya perdido todas sus propiedades.
06. Protección interior
Empieza tu rutina de protección solar días antes de tus vacaciones en la playa con una dieta rica en carotenos -ver-duras de hoja verde oscura, hortalizas y frutas cítricas, amarillas y anaranjadas- y frutos secos -ácidos grasos esencia-les-. Durante las vacaciones recuerda tomar mucha agua, de dos a tres litros por día, y consumir alimentos frescos.
07. Zonas sensibles
La capa córnea de la piel es más fina y sensible en los párpados, orejas y nariz, por lo que pueden aparecer manchas, arrugas, flacidez y venitas rojas con mayor facilidad. En esas áreas utiliza protección 50 y repite la aplicación con frecuencia.
08. Respeta los horarios
No importa cuánto mueras por estar en la playa, entre las 11 am y 4pm, hay muchos rayos UV y de ahí mucho más riesgo. Aunque te encuentres en la sombra, recuerda que la arena y el agua reflejan los rayos del sol en un 50 a 90%, lo suficiente para enrojecer tu piel.
09. Guerra a los rayos
Incluye en tu equipaje camisetas con UV, gorras y sombreros de ala ancha. Usar gafas con protección es un must, recuerda que cerca del agua, los ojos están aún más expuestos debido al fenómeno de refracción, por lo que es indispensable cubrirlos bien.
10. No olvides el after-sun
Los after-sun de última generación son auténticos tratamientos antiedad que contienen potentes activos antioxidan-tes, extractos vegetales, minerales y vitaminas, que combaten el fotoenveje-cimiento -manchas, arrugas y flacidez-, el estrés oxidativo y mejoran la red de colágeno y elastina -responsable de la elasticidad y la firmeza-. Aplícalos sin falta luego de tu jornada bajo el sol y a diario, después de las vacaciones.
