Es fundamental entender que las personas con pensamientos suicidas viven en una difícil situación de salud mental de la que no hay por qué avergonzarse. Nuestro deber es generar un ambiente de apoyo y empatía para que así ellos busquen ayuda y logren superar esa etapa de su vida.
Factores más frecuentes que conllevan al suicidio
Mirna Rodríguez, psicóloga del Teléfono de la Esperanza, detalla cuáles son algunos de los factores que conllevan el riesgo de suicidio, aquí te los dejamos para que puedas conocer un poco más sobre ello.Historial de intentos suicidas
Puede que parezca obvio, pero es muy importante prestar atención a personas que ya hayan tenido intentos de suicidio o expresado ideas suicidas. Este es el factor de riesgo más importante. Los intentos de suicidio no son una forma de llamar la atención, es algo muy serio que nunca debemos pasar por alto.
Enfermedades mentales
Especialmente las relacionadas al trastorno de la depresión, esquizofrenia, trastorno de personalidad, así como a la adicción al alcohol u otras drogas. No todas las personas con alguna de estas enfermedades tienen pensamientos suicidas, pero si lo han expresado, ya sea con palabras o actos, es en definitiva un factor de riesgo.
Problemas de salud o dolor crónico
La posibilidad de suicidio es alta en las personas que sufren problemas graves de salud física, especialmente asociadas al dolor severo o de afectación crónica, debido al panorama negativo sobre la enfermedad y sus repercusiones.
Problemas laborales o económicos
Hay una correlación importante entre la crisis económica o el desempleo y el suicidio, debido a que la situación económica puede ser detonante a la vez de depresión grave o trastorno de ansiedad.
Soledad o aislamiento
A este factor de riesgo suicida se asocia la inestabilidad emocional, desesperanza y conflictos existenciales. Estar alejado de familia y amigos por mucho tiempo puede tener un gran impacto en la salud mental y emocional de las personas, especialmente con la actual pandemia por COVID-19. Siempre es buena idea mantener el contacto habitual con nuestros seres queridos si imaginamos que están pasando por momentos difíciles.
Familiares que se han suicidado
Muchas veces un suicidio de alguien cercano crea un impacto emocional tan grande en las personas que genera más de estos impulsos, especialmente cuando fue un padre, madre, hermanos o parejas.
Violencia en cualquiera de sus formas
Este factor de riesgo se refiere a situaciones ya sea de abusos, siscriminación, maltrato, violencia sexual, bullying u otros.
Señales que podemos observar en personas con tendencia al suicidio
Cambio de hábitos alimenticios o de sueño.Mayor consumo de alcohol, drogas o analgésicos.
Incapacidad para pensar o tomar decisiones.
Expresión de sentimientos de infelicidad extrema o depresión.
Expresión de sentimientos de aislamiento o de no importarle a nadie.
Expresión de sentimientos de inutilidad. Malas calificaciones, en el caso de estudiantes.
Desesperación o falta de control. Cambios de humor. Conductas violentas.
Quejas de dolor o incapacidad de visualizar un futuro sin dolor.
Entrega de posesiones valiosas o apreciadas.
Período repentino de alegría o de energía después de una depresión.
Hablar o escribir acerca de la muerte/suicidio.
Prepararnos para dar asistencia y apoyo
Si una persona que conoces ha expresado ideas suicidas, lo mejor que puedes hacer es ayudarlo para que busque ayuda profesional. Además de esto, hay otras cosas que pueden servir de apoyo. La licenciada Mirna, experta en el tema, nos sugiere considerar los siguientes aspectos.Ofrecer a la persona la oportunidad de hablar, preferiblemente en un espacio privado. Pero no presionar si no desean hablar del tema en específico.
Brindar confianza, escuchar con una mente abierta sin juzgar.
Hablar de manera clara y directamente, no temer hablar del suicidio en el momento apropiado.
Dejar que la persona hable, respetando los sentimientos que la persona exprese. No ser confrontativo.
Procurar identificar si hay situaciones u objetos peligrosos, o si la persona tiene un plan suicida.
Respetar los silencios, es posible que la persona quiera un tiempo para poner en orden sus pensamientos, antes de responder o compartir sobre la situación que enfrenta.
Demostrarle que le importa interesándose en las actividades que le agradan, por ejemplo si es una persona joven hay que motivarla a compartir sobre sus intereses; si es una persona adulta mayor, ayudarla a sentirse útil.
A quién acudir
Si estás pasando por un momento difícil y vienen a tu mente pensamientos suicidas o de autolesiones esto es lo que puedes hacer.Busca a alguien en quien confiar y habla de tus pensamientos y sentimientos. Comuníquese y explique lo que le ocurre.
Gestiona la atención profesional a nivel de psicología o psiquiatría. Familia, amigos, grupos comunitarios o Iglesias son un apoyo invaluable, pero la ayuda profesional especializada es un factor determinante e irremplazable para superar este problema.
Con ayuda del o la profesional, de familiares o amistades prepara un plan de seguridad, el cual ha de incluir tus propias señales de alarma que desencadenan la crisis. También escudos emocionales, es decir las actividades que favorecen su bienestar físico y emocional.
Dedícale tiempo a tus aficiones, aquellas que le resultan gratificantes y mejor si las comparte con otras personas. No esperes a tener ganas, poco a poco volverás a disfrutar de ellas.
Tener pensamientos suicidas es agotador y desgastante, tanto física como mentalmente, pero puedes superarlo y disfrutar de la vida otra vez. Tú puedes, no estás solo.