Donald y Melania Trump: Una historia de amor entre lujo, poder y controversia

Desde su primer encuentro en una fiesta en Nueva York, Donald y Melania Trump han sido una pareja rodeada de lujo, poder y controversia. A través de más de dos décadas y numerosos desafíos, su relación ha sido un reflejo de ambiciones compartidas y momentos difíciles, especialmente durante los años en la Casa Blanca. Aquí repasamos los hitos de esta fascinante historia de amor.

Donald Trump conoció a Melania Knauss, una modelo eslovena, en una fiesta durante la Semana de la Moda de Nueva York en 1998.

Aunque Melania se resistió a darle su número de teléfono, al final él le dio el suyo. Melania lo contactó días después, y así inició su relación. Donald se mostró persistente y conquistó la modelo con su estilo de vida glamoroso, llevándola a eventos importantes y reuniones sociales de alto nivel.

Desde el inicio de su noviazgo, fueron el centro de atención, especialmente en los círculos de la alta sociedad de Nueva York. Su diferencia de edad (Donald es 24 años mayor) generó comentarios, pero eso no pareció afectar su relación.

Tras seis años de noviazgo, Donald le propuso matrimonio en 2004 con un anillo de diamantes valorado en 1.5 millones de dólares.

Se casaron el 22 de enero de 2005 en una lujosa ceremonia en Palm Beach, Florida, a la que asistieron celebridades como Hillary Clinton y los íconos de la sociedad estadounidense. Melania lució un vestido Dior hecho a medida, valorado en alrededor de 100,000 dólares, y cubierto con 1,500 cristales, que se robó todas las miradas y marcó la boda como un evento memorable.

En 2006, Melania dio a luz a su primer hijo, Barron William Trump. Se convirtió en su prioridad y, aunque Donald ya tenía otros hijos, Barron creció muy unido a Melania.

Melania formó parte de las empresas Trump, apoyando a su esposo en diferentes negocios y eventos, aunque también mantuvo su propia carrera de modelaje y diseño de joyas.

A pesar de su reserva, Melania apoyó a Donald en su carrera presidencial, a menudo acompañándolo en los mítines y dando discursos.

En 2017, Melania se convirtió en la Primera Dama de Estados Unidos, una posición que desempeñó de forma discreta y con una imagen cuidadosa, a menudo recibiendo críticas y especulaciones sobre su relación con Donald.

A lo largo de su matrimonio, su relación ha sido objeto de rumores, sobre todo en los años de la presidencia, pero ambos han mostrado una imagen de unidad en público.

Tras finalizar la presidencia de Trump en 2021, la pareja ha llevado una vida más privada en Florida, aunque siguen apareciendo en eventos públicos y mantienen un estilo de vida en el que apoyan las causas y ambiciones políticas de Donald.