El Covid-19 nos ha puesto en alerta a nivel global. Las últimas semanas hemos escuchado toda clase de consejos preventivos, tips y recomendaciones. Pero como tratándose de una pandemia nunca es suficiente, conversamos con la doctora Daniela Rodríguez de la Clínica Médica Politerapéutica de Tegucigalpa, quien comparte algunos consejos fáciles de seguir y recetas de remedios elaborados con productos e ingredientes que seguro tienes en casa. La prevención es la mejor arma ante este virus, ¡toma nota!
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1.Cada mañana, en ayunas, toma medio vaso de agua tibia con el jugo de medio limón y la punta de una cucharadita de bicarbonato de sodio, “esta combinación nos ayuda a cambiar el PH de la sangre y es un excelente hidratante. Se puede tomar hasta por un mes”, dice la experta.
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2.Mezcla ¼ taza de jengibre rayado y ¼ taza de cebolla (morada o blanca) finamente picada. Vierte la preparación en un frasco de vidrio y cubre con una taza y media de jugo de limón, tapa y deja reposar 24 horas. “Toma dos cucharadas de la mezcla anterior (solo el líquido) cada tres, seis u ocho horas, según tu elección o si tienes alguna afección. Puedes ir agregando más jugo de limón y mantener la misma base de la mezcla por cinco días. Si deseas dárselo a los niños, diluye las dos cucharadas en medio vaso de agua con una cucharadita de miel. Esta preparación es maravillosa para la salud de los pulmones y las vías respiratorias. Fortalece el sistema inmunológico y además, el jengibre es un quemador de grasas por excelencia y limpia las arterias”, explica la doctora.
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3.El té de jengibre es la bebida por excelencia para combatir enfermedades respiratorias. “El jengibre es un purificante y excelente digestivo, tiene propiedades expectorantes y antitusivas. Además, ayuda a fortalecer el sistema inmunitario. Por ello, es ideal para prevenir y tratar gripes y resfriados. Recordemos que las bebidas calientes favorecen a la prevención de coronavirus y otras enfermedades respiratorias. Puedes tomar hasta dos tazas diarias, tanto para prevenir como para combatir este tipo de males”.
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4.La hidratación constante es también básica para enfrentar males respiratorios. “Una persona hidratada tiene la sangre fluida y destila y suda más fácilmente así que cuando nos enfrentamos a enfermedades virales como esta es necesario consumir agua constantemente”. Si presentas síntomas de deshidratación, la doctora Rodríguez recomienda consumir suero casero o de los disponibles en farmacias, “también puede aplicarse un suero de rehidratación 1 a 2 veces por semana. Es muy importante beber 3 litros de agua diarios a sorbos y llevando bien las cantidades, la diferencia está en que cuando un toma de un solo uno o dos vasos de agua pues limpia y excreta rápidamente mientras que si se hace a sorbos hidrata cada zona del cuerpo y la mantiene húmeda, esto es muy bueno ya que evita que se aloje fácilmente el coronavirus ya que según se ha observado, la garganta seca favorece su propagación”.
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5.Gárgaras con bicarbonato. Mezcla la mitad de un vaso de agua al tiempo o tibia con el jugo de medio limón y media cucharadita de bicarbonato y haz gárgaras al levantarte y antes de acostarte, “esta mezcla asegura la asepsia de la faringe. Sentirás un quemor, propio de un antiséptico, pero es normal. Realiza estas gárgaras de dos a tres veces si tienes algún tipo de infección para evitar que crezca o baje a los pulmones”.
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6.Té, té y más té. Las propuestas de sabores se han vuelto infinitas así que tomar té no te resultará nada difícil. “Para mantener la faringe caliente recomiendo el consumo frecuente de té a lo largo del día. Mantén siempre contigo un bote que mantenga el agua caliente por muchas horas y prepárate las bebidas al gusto. Una medida tanto preventiva como combativa”.
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7.Más que un remedio, un consejo final de la doctora Rodríguez, y que ya a estas alturas de la crisis todos debemos seguir, “es un mandato llevar todas las medidas de bioseguridad y hay una en especial que considero una de las más valiosas: por nada del mundo tocarse la cara. Hagamos el hábito de no llevar las manos a la nariz, ojos y rostro porque son las ventanas por donde entra el virus. Es muy difícil pero debemos luchar contra ese gesto natural”.