¿Quién es este ejecutivo de altos kilates que ahora juega en las grandes ligas del mundo empresarial en el continente?
Comenzaremos por contarte un poco de su infancia, que transcurrió feliz en una verde finca bananera en Honduras, rubro al que se dedicaban sus padres y su familia, ligada a esta industria desde sus orígenes en el país.
Desde chico recuerda ser un devoto de Coca Cola, aunque en esa etapa no imaginaba que su vida estaría ligada a esa compañía, "entonces era común que después de la escuela jugáramos al fútbol y al final del partido nos tomáramos una Coca-Cola. Recuerdo que costaba 10 centavos y la cosa era reunir ese dinero para tomarnos esa Coca-Cola bien fría después del fútbol. Ese es uno de esos recuerdos que nunca se me olvidan, por mi amor al fútbol y al pueblo donde nací", dijo Rivera en una entrevista para el portal de la compañía.
El comienzo
Tenía 8 años cuando realizó una inolvidable visita escolar a la embotelladora de Coca-Cola en Honduras, sin imaginar que con los años terminaría trabajando ahí. Y es que el destino no lo puedes evadir, desde muy joven, Alfredo tenía trazado el rumbo a seguir.Ingresó a la compañía en Honduras como analista financiero, "trabajaba con proyectos de inversión de la Compañía, justificándolos y analizándolos. Uno de esos proyectos consistía en establecer tasas de descuentos a los distribuidores. Mi trabajo era acompañar al camión y pasar tiempo con los distribuidores en sus pueblos".
Pasó poco más de un año recorriendo todos los pueblos de Honduras, estudiando cómo operaban y entendiendo su estructura de costos, lo que asegura le dio una experiencia "que no todo el mundo tiene, que es vivir muy de cerca una parte muy importante de nuestro negocio que es la distribución de nuestras marcas".
Carrera en ascenso
De ese primer puesto han pasado más de dos décadas además de muchos cambios de posiciones y destinos geográficos que lo han llevado a El Salvador, Guatemala, Brasil, Ecuador México y Costa Rica. En 2013 fue nombrado presidente del Grupo de América Latina, con sede en San José, Costa Rica, puesto en el que lideró más de 40 países, y en el que la unidad bajo su liderazgo alcanzó el máximo premio de la compañía: la Copa Woodruff, "nunca me he aburrido. Ha sido siempre una experiencia intensa, pero siempre en sentido positivo para mí y las personas que me rodean".Licenciado en historia, con una maestría de la Universidad del Sur de Mississippi y graduado del Programa de Gestión Avanzada en la Escuela de Negocios de Harvard, Alfredo fue nombrado para orgullo propio y para inspiración de sus compatriotas como el nuevo Presidente de Coca-Cola Norteamérica, sustituyendo a James L. "Jim" Dinkins, quien se retira después de una carrera muy exitosa en la compañía. Su nueva sede será en Atlanta, Georgia.
"Alfredo ha tenido una carrera notable en América Latina, en un gran número de mercados altamente complejos y diversos", dijo James Quincey, presidente y CEO de The Coca-Cola Company. "Alfredo ha construido una organización que está posicionando nuestro negocio para salir más fuerte de la pandemia actual", concluyó.
