A la cita acudieron familiares, cercanas amistades y autoridades municipales, quienes alabaron el espíritu emprendedor de la familia, por venir creando y generando empleos para muchos hondureños desde hace más de 50 años.
Antes de realizar el tradicional corte de cinta, el padre Fernando Ibañez bendijo las instalaciones, no sin antes leer las sagradas escrituras en el libro de los Salmos en el capitulo 127, verso 1 que dice: Si Jehová no edificare la casa, En vano trabajan los que la edifican.
Luego de los actos se ofreció un brindis con espumoso champagne y se invitó a los asistentes a recorrer las instalaciones y degustar el exquisito bufe que prepararón los chefs del Centro Social Hondureño Arabe, para la ocasión.
El encuentro se prolongo por varias horas entre felicitaciones, fotos para el recuerdo y la animación musical del Duo Rouge.