“Pretty Baby”, es el nuevo documental autobiográfico de Brooke Shields donde la actriz de 57 años desnuda los momentos más crueles que vivió siendo muy joven, y donde sin censura desvela el episodio de violación que vivió cuando tenía 20 años.
Mucho tiempo estuvo callada hasta que tomo la decisión de hablar por primera vez del infierno que vivió, y donde detalla cómo fue el episodio que la persiguió y avergonzó durante años. Era 1987. Tras terminar la universidad, la actriz quería regresar al mundo del cine y cenó con un productor de la industria para hablar sobre posibles proyectos.
Después de la cena, regresaron al hotel donde él se hospedaba y desde donde él se ofreció a pedirle un taxi a casa. “Subí a su habitación y él desapareció”, relata ahora la actriz. Aquel hombre regresó unos minutos después a la habitación, completamente desnudo, y se abalanzó sobre ella: “Tenía miedo de que me ahogara” afirma
“No peleé mucho, no lo hice. Me quedé congelada. Un “no” habría sido suficiente, pero solo pensé: “mantente con vida y después te vas”. Solo me callé y esperé”, relata Shields sobre la violación. Cuando todo acabó, ella se marchó de la habitación, cogió un taxi y lloró durante “todo el camino” hasta la casa de un amigo.
Asimismo, reconoce que no procesó la violación hasta mucho tiempo después y que durante ese periodo se culpó a sí misma por la agresión: “creía que de alguna manera había enviado algún mensaje inapropiado. Bebí vino, subí a la habitación... Él se sentía confiado”.
Brooke se llamó al silencio por mucho tiempo, hasta que tomo la decisión de enviarle una carta a su violador para confrontar lo que había hecho. El tiempo paso, pero nunca tuvo una respuesta,” le dije: ‘¿Sabes qué? Me niego a ser una víctima porque esto es algo que sucede sin importar quién eres y sin importar si estás preparada o no”. Quiso borrar todo lo sucedido de su mente, pero, según relata, ni su cuerpo ni el sistema, la industria, la ayudaron en el proceso y simplemente tuvo que volverse más fuerte e intentar pasar página por su cuenta y con el paso del tiempo.
En el documental la actriz aborda varios temas entre ellos: la sexualización de las personas que llegan a la industria, la obsesión de los medios con la virginidad, el alcoholismo de su madre y la relación con el tenista Andre Agassi quien fue su primer esposo y solo duro cuatro años casados. Ahora vive feliz al lado del guionista Chris Henchy.