La junta que otorga este premio describió el álbum de Lamar como ''una colección de canciones virtuosas unidas por su autenticidad vernácula y su dinamismo rítmico que ofrece viñetas que capturan la complejidad de la vida afroestadounidense moderna''.

En esta producción discográfica, el rapero nos muestra indirectamente su rol cultural hablando de la experiencia de los afroestadounidenses, la vida de la calle, la brutalidad policial, la perseverancia, la supervivencia y la autoestima.
El Pulitzer (conocido por premiar la excelencia en periodismo, literatura y música) ha condecorado a artistas de jazz como Wynton Marsalis y Ornette Coleman, pero Lamar se ha convertido en el primer artista completamente urbano (no clásico ni de jazz) en ganar este anhelado premio.
Sin duda un premio muy merecido para el rapero, ahora solo queda esperar que se lleve alguno de los Gramófonos que la Academia Nacional de Artes y Ciencias de la Grabación de Estados Unidos otorga.