Cómo animarte para ir a terapia

Si has considerado la idea de asistir a terapia pero sientes que aún no estás listo para dar ese paso, no estás solo. Muchas personas experimentan dudas y temores antes de iniciar este viaje. Aquí, te compartimos algunos consejos que te ayudarán a prepararte y animarte a buscar tu bienestar emocional.

Recuerda, ¡es una experiencia positiva! Aunque la idea de ir a terapia te asuste un poco es importante mentalizarse que está es una experiencia positiva en la que buscamos nuestro bienestar emocional. Romantizar la experiencia te puede ayudar a perder este miedo.

Olvida los estereotipos. Muchos creen que ir al psicólogo es solo para personas “locas”, escuchar estas opiniones erróneas crean vergüenza y temor a una experiencia que busca mejorar tu bienestar emocional. Ir a terapia es una experiencia valiosa para cualquier persona que busca mejorar su bienestar emocional.

1. Crea tu lista: haz una lista de los temas que te gustaría explorar con tu psicólogo y puedes contestar preguntas como ¿por qué decidí ir a terapia?, ¿qué está pasando en mi vida que me llevó a tomar esta decisión?, así tendrás una visión clara de las expectativas que tienes de esta experiencia.

2. Busca un buen terapeuta: tu psicólogo tiene que ser una persona en la que confías al 100% por lo que tiene que ser alguien que te haga sentir cómodo y te entienda, también debes asegurarte de que sea un profesional certificado.

3. Sé honesto contigo mismo: la terapia es un espacio seguro para expresar tus sentimientos y la vergüenza es un obstáculo para tus emociones. Atrévete a explorar tus sentimientos libremente.

4. Sé paciente: este camino de autoconocimiento no traerá soluciones inmediatas a tus problemas. Los resultados llegarán a su debido tiempo y con mucho trabajo de tu parte.

Recuerda que al ir a terapia estás invirtiendo en tu bienestar, piensa en los beneficios que trae: te conocerás mejor, aprenderás a manejar tus emociones, mejorarás tus relaciones y aprenderás a disfrutar más de la vida y a alcanzar tus metas. Cada pequeño avance cuenta, y dar el paso hacia la terapia puede abrirte a nuevas oportunidades. No dudes en buscar el apoyo que necesitas, ¡no estás solo!