Todos deseamos una segunda oportunidad en nuestras vidas. Si bien es cierto que nuestros aciertos y desaciertos definen quienes somos, a veces miramos atrás y nos preguntamos ¿Qué paso?
La revista Forbes reune en su versión digital el artículo '10 lecciones de liderazgo que desearia haber aprendido a los 20' de Todd Wilms
A continuación presentamos un extracto del artículo.
1. Corre con los ojos vendados.
Las personas pasan la mayor parte de su tiempo preguntándose qué es lo que pasa, en vez de actuar. 'Qué es lo que están haciendo? Qué es lo que el grupo hace? Porqué un grupo tiene determinado proyecto?' En el mejor de los casos es una perdida de energía y en el peor es una verdadera distracción que te detiene de ser extraordinario. No fue hasta mediados de mis 30s que alguien me dio este consejo. Su mensaje fue sorprendentemente simple: 'corre como si nadie más importara'.
Obviamente, esto no significa que debes convertirte en un ermitaño y tampoco que no vas a trabajar con otras personas, pero si te ves preguntándote sobre lo que hacen los demás y esto no te va ayudar a ti, entonces estás perdiendo el tiempo. Así que venda tus ojos y enfócate en tu trabajo.
2. Todo es personal, nada es negocio
Contrario a lo que pregona Hollywood, el negocio si es personal. Decir lo contrario puede ser una forma de racionalizar para poder dormir en la noche pero mientras más rápido lo admitas, más rápido aprenderás a dirigir. Toda decisión que tomes a la hora comprar o no, impactará directamente en alguien más.
Saber que es personal, no debería detenerte de hacer lo que es correcto para tu negocio. Mientras más rápido te acostumbres a lo personal, más rápido aprenderás a reaccionar apropiadamente a la hora de tomar decisiones.
3. Piensa en una carrera a largo plazo
A medida acumules años, tu mundo se irá achicando cada vez más. Con esto en mente, a veces las mejores decisiones son aquellas que se realizan con un objetivo a largo plazo, aun cuando esto afecte las ganancias a corto plazo. Al pensar en una carrera a largo plazo, en vez de tu objetivo de este fin de semana, te permitirás tomar mejores decisiones. Los grandes líderes están consciente de las repercusiones de sus decisiones a largo plazo y lo que traerá mañana lo que elijas hoy.
4. Encuentra un mentor
Siempre ten un coach, un confidente o un asesor ya sea formal o informal. Lo importante es que cuentes con una persona a quien recurrir en cada estadio de tu vida. Esta persona puede cambiar a lo largo del tiempo.
Siempre hay una persona mejor que tu, así que encuéntrala.
5. Hay gente increíblemente talentosa dispuesta a ayudarte
Uno de mis mentores, explica Wilms, me contó cómo se acercaba a la gente que admiraba y les hacia algunas preguntas, o sea su consejo de experto. Todo esto en un tono respetuoso de la persona y de su tiempo.
Hasta el momento, he tenido interacción con un expresidente de los Estados Unidos, un premio Nobel de la Paz, muchos autores, CEO y luminarias del mundo de los negocios, todo porque tuve valor y pregunte. No todos van a responder, pero esta bien. En el futuro, no firmare sus memorias cuando lo soliciten.
6. El liderazgo no necesita de un titulo
No esperes a que te designen para liderar. El liderazgo consiste en ayudar al negocio a tener éxito y a quienes se encuentran a tu alrededor y hacen esto posible. El liderazgo también consiste en tener confianza y que aquellos que están a tu alrededor sepan que les estás apoyando.
Demasiados empleados y administradores jóvenes sienten que 'cuando obtenga ese puesto, podre guiar este lugar.' Tu actitud debe mostrar liderazgo en el primer día de trabajo. Si no sabes que es lo qué hacen, empieza por conocer a la gente y en que es lo que trabajan, su historia y que los hace funcionar. Tu influencia iniciará con orientación. Los buenos líderes no esperan promociones para actuar.
7. Aprende a comer S***t
Todos tenemos a alguien que es más poderoso que nosotros. Para las personas orgullosas e independientes, esto será todo un desafío. Aprende a hacer las cosas que no te gustan, que no quieres hacer o que no se encuentran en tu zona de confort. Si, puedes renunciar o quejarte, pero ten por seguro que te encontrarás con el mismo problema en tu próximo empleo.
Por cierto, iniciar tu propia compañía o ser tu propio jefe no te librara de esto. Si tienes tu propia compañía, tienes inversores, socios y clientes a quienes les perteneces. Así que lo mejor será que te vayas acostumbrando y lo aceptes. De esta forma tu carrera crecerá y cada vez serán menores las ocasiones en que te sientas frustrado. Si no te gusta, también puedes irte a vivir sola en una isla...
8. Tu red de trabajo debe ser inversamente proporcional a tus relaciones personales
En tus 20s tendrás acceso a personas que eventualmente se convertirán en amigos de toda la vida. No puedes predecir quienes son ellos. En mi caso algunos de los amigos que pensé que estarían a mi lado por el resto de mi vida, están ahora fuera de ella, solo para ser remplazados por amigos fantásticos que no pensé llegar a tener. En este estadío de tu vida tendrás una red mayor de amigos y conocidos, ya que no estás limitado por las responsabilidades de la vida (hijos, horarios y padres). En este momento, tu red de negocios es un infante.
Con el tiempo, tu red de negocios crecerá, mientras tus amigos disminuirán (pocos, pero posiblemente relaciones más duraderas). Saber que esto sucederá, te ayudará a seleccionar a tus amistades y efectivamente hacer crecer tu red de negocios.
9. Lo más importante es que aprendas a manejar los grandes errores
Con el tiempo, vas a cometer grandes errores. Cuando los desastres épicos llegan, cómo los manejes será lo que te definirá. Ya sea que decidas enfrentar con valentía tu responsabilidad o que culpes a los demás, di '¿Qué sigue?'
Cómo lo manejes, enviará una señal clara de tu entereza hacia tus amigos y hacia tu red de trabajo. El liderazgo se demuestra tanto en el éxito como en el fracaso.
10. Siempre levántate
Puede ser que ahorita digas: 'Obviamente, debo levantarme. ¿Por qué no lo haría?' era lo que decía Wilms hace una década pero con el tiempo, admite que se ha dado cuenta que algunas personas después de cometer el cuarto o quinto error no logran levantarse.
Así que recuerda que se trata de una maratón, piensa a largo plazo. Así que siempre levántate, aun cuando prefieras esperar la cuenta hasta 10. Aquellos que continúan levantándose a pesar de las adversidades, aprenden que detrás de todo error hay una oportunidad.
Extra: Espera, sé paciente
El cambio es inevitable. Nuevas estructuras en la organización, nuevos jefes, fusiones y una interminable lista de personas que entran y salen de tu vida profesional. Similar a cuando corres con los ojos vendados, cuando veas que grandes cambios se aproximan, hay una tendencia a querer reaccionar en contra de la situación. No lo hagas. La mayoría de las ocasiones se tratara de inconvenientes menores y en el peor escenario son molestias. Así que respira profundo.
Con el tiempo, he aprendido de la manera más dura, explica Wilms, que si algo se interpone en mi camino, puedo esperar a que pase. Ellos se mueven, se apagan o incluso se convierten en mis defensores. Usualmente el mal pasa y al final te encuentras en un mejor lugar por simplemente haber esperado.