Una base crujiente de galleta más una mezcla suave como relleno la convierte en un exquisito postre para acompañar cualquier ocasión en especial en otoño e invierno.
Ingredientes
Para la galleta base, necesitarás:210 gramos de harina.
85 g. de azúcar glasé.
10 g. de azúcar.
1 cucharadita de sal.
25 g. de almendra molida.
125 g. de mantequilla fría.
1 huevo.
Para el relleno:
450 g. de puré de calabaza (900 g. de calabaza cruda).
400 g. de leche condensada.
1 cucharadita de canela1/2 cucharadita de jengibre.
1/2 cucharadita de nuez moscada.
1/2 cucharadita de clavo molido1/2 cucharadita de sal.
2 huevos.
Preparación paso a paso
Para preparar este irresistible postre primero deberás limpiar la calabaza eliminando las hebras y las semillas. Corta en piezas grandes la calabaza y la colocas, con la cáscara por arriba, en un recipiente para el horno, este lo llevas a 165°C durante aproximadamente 1 hora hasta que estén lo suficientemente blandos para hacerlos puré. Con un tenedor machaca la calabaza y deja que escurra en un colador por una hora más.Relacionados
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Durante la calabaza está en el horno puedes aprovechar para preparar la masa de la base crujiente del postre, para este comienza tamizado la harina para luego mezclar con el azúcar, la sal y la almendra molida. Luego de esto, añade la mantequilla fría en trozos y amasa hasta lograr una textura de masa gruesa. A continuación, vierte el huevo semi batido y con una cuchara firme, amasa hasta lograr una bola de masa. Dale forma en el fondo del recipiente para pie y métela en el refrigerador aproximadamente dos horas.
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A continuación prepararás el relleno suave de calabaza. Separa 400 g. de puré de calabaza y bátelos a velocidad mínima hasta lograr un puré suave y agrégale 400 g. de leche condensada y dos huevos a la mezcla, estos se añaden uno a uno integrándolos suavemente para que la mezcla no agarre aire.
Añade el relleno en el molde e introduce en el horno precalentado a 210°C 15 minutos. Después baja la temperatura a 165°C y hornea otros 40 minutos. Es importante que durante el proceso no abras el horno; pasados esos 40 minutos realiza la prueba del tenedor, pincha la masa y si este sale limpio significa que está casi listo; apaga el horno y espera a que enfríe pues el pastel terminará de hacerse con el calor residual del horno. Una vez frío estará listo para servir.