La firma busca acentuar sellos característicos de sus diseños como el lazo look pijamero de las camisas y pantalones palazzos, combinados con camisas o maxi listones de popelín, en un contraste perfecto.

El regreso de la organza, en una combinación perfecta CH, también presenta sus clásicos vestidos a rayas, con fajínes a la cintura en una combinación de texturas evocantes al glam de los años 50, moldeando la figura de la mujer sofisticada que busca lucir elegante, sencilla y cómoda al mismo tiempo.
Una exquisita combinación de hojas, jazmines, lunares, rayas marineras que apuntan a ese lado fresco y juvenil de las chicas fashionistas. Las maxis o mini bags de piel y bufandas de sedas de colores, se vuelven las mejores compañeras.

Dentro de la Colección Resort prevalece el rojo, que nunca pasa de moda en las creaciones de la diseñadora venezolana, para esta ocasión llega acompañado de accesorios en naranjas, azules intensos y algunos tonos neutros desde el color arena o el camel.
Recordemos que Carolina Herrera ha celebrado en 2016 sus 35 años de carrera y con esta colección ella rinde homenaje a la belleza atemporaral pero orientada hacia la mujer actual.