Ahora no solo la comida: tus tratamientos capilares, faciales, y snacks, si llevan coco, estás in. Laura Wesson es nutricionista y desde San Diego, California, nos contó por qué todos andan locos por el coco, y si es tan bueno, cómo hacerlo parte de la rutina diaria.

Del coco, se aprovecha prácticamente todo: de ahí que ahora conseguís aceite, pulpa, rayadura, leche y se adapta a casi cualquier dieta moderna.
A los que nos gusta su aroma, es fácil usar el aceite de coco para cocinar (no sabés el sabor que da). O tal vez sí lo sabés, la comida caribeña que tanto nos gusta, lo usa. Y además, ¡es una grasa buena! Una de esas grasas que sí vale tener a mano.

"Si es posible, busquen el aceite de coco 100% virgen, entre sus múltiples beneficios, acelera el metabolismo, muchas personas ya lo usan por sus propiedades anti bactericidas, hasta como bloqueador solar, hidratante de cabello, para sanar heridas" comenta Laura. "Muchos de mis pacientes comenzaron a incluir aceite de coco en sus dietas, y además del bienestar general, reportaron disminución del acné, dejaron las migrañas, mejoraron notablemente sus diagnósticos cardiacos, hasta gente con hígado graso vio cambios".

Nada: pues qué ganas de irlo probando poco a poco con la guía de un nutricionista: ya te veo haciendo tu chantilly de leche de coco, poniéndole aceite de coco a las recetas, y mi batido favorito: leche de coco, cocoa puro… ñam! Energía y salud, en un ingrediente que sin duda es trendy: contacta a Laura, que por cierto hace sus propios helados de coco, para morirse: wessonnutrition@gmail.com