Con su música ha superado todas las expectativas, convirtiéndose en una verdadera estrella pop. Con su look, ella es odiada y amada en la misma medida. Y es que sus excéntricos atuendos siempre son tema de conversación a donde quiera que vaya.
Lady Gaga ha conseguido ser más que una cantante, una celebridad con imagen propia, tanto así que la revista Vanity Fair la incluyó en su codiciada lista de Los Mejor Vestidos, compartiendo honores con personalidades como Michelle Obama, Carla Bruni, Javier Bardem, Diane Kruger y David Beckham, entre otros.
Para algunos, su aparición en la mítica lista podría considerarse una ironía o incluso una broma de mal gusto. Sin embargo, para Amy Fine Collins, quien eligió a los personajes que aparecen en la revista, "las mujeres que están en la lista tienen un fuerte sentido de la elegancia y no se parecen a nadie. Tienden a liderar en materia de moda, en lugar de seguir tendencias'.
A favor o en contra, lo cierto es que Stefanie Joanne Angelina Germanotta, -el verdadero nombre de Lady Gaga- sabe como proyectar una imagen original, inspirada en parte en el look de sus íconos, Madonna, Michael Jackson y David Bowie, que al igual que ella, se destacaron por sus atuendos excesivos y desafiantes.
El guardarropa es parte vital de la carrera de la artista que apuesta por un look tan sugerente como sus canciones. Y es que como dijera en una reciente entrevista para MTV, "cuando estoy componiendo, sólo pienso en la ropa que usaré para cantar esa canción".
Sus irreverentes atuendos siempre son tema de noticia. Tocados en forma de elefante, abrigos hechos con muñecos de la Rana René, máscaras cubriendo su rostro y faldas de látex son apenas algunos de los más memorables, "me visto así porque inspira mi vida. Toda mi existencia es arte y performance", ha declarado la cantante, que no escapa de los críticos que la acusan de copiar a otros artistas y reproducir los modelos de famosos diseñadores.
Su máxima influencia es el estilo de los 80: colores ácidos, vestidos asimétricos de líneas dramáticas, bodies, tocados vanguardistas, peinados exagerados, zapatos imposibles…un look muy parecido al de la otra reina del pop, Madonna. Lady Gaga fue una fiel clienta de Alexander McQueen, su musa inspiradora es Donatella Versace, adora los diseños del argentino Víctor de Souza y ha vestido en ocasiones especiales modelos de Alta Costura de Armani.
Más allá de su imagen estrafalaria, Lady Gaga ha demostrado que a sus 24 años es toda una estrella. La artista, nacida en New York, es cantante, compositora, productora musical, bailarina y pianista. En 2008 lanzó su álbum debut, The Fame, con el que vendió más de 12 millones de copias. A finales de noviembre de 2009, presentó su segundo disco, The Fame Monster, convirtiéndose en uno de los diez álbumes más vendidos de casi todos los países donde fue lanzado. En mayo de este año, Time la nombró una de las 100 personas más influyentes del mundo, y un mes después, Forbes la denominó la cuarta celebridad más poderosa e influyente del mundo.