Sydney Johansson, la adolescente de 17 años de Fountain, Colorado, estaba muy emocionada para que le tomaran sus fotos para su último año de secundaria. Contrató a una fotógrafa local, Jessica Vallia, y tenían planeado ir a Garden of the Gods, un monumento nacional. Pero, su suerte rápidamente dio un giro y empezó a llover. "Nos metimos al carro y estábamos manejando por [la ciudad] buscando lugares para tomar estas fotos," le dice Jessica Vallia a KKTV. "Terminamos en el estacionamiento de Starbucks porque parecía la cosa más a la moda que podíamos hacer." Jessica también le mencionó a POPSUGAR que Sydney tenía que tomarse las fotos ese día ya que tenía una cirugía programada más tarde en el més.
Aunque estaban un poco aprensivas de pedir un favor, Laura, la mamá de Sydney, luego entró a la tienda y le explicó la situación a Chris, el supervisor de turno, enfatizando que Sydney usa una silla de ruedas, y eso significa que sus opciones de lugares eran más limitadas.
Sin dudarlo un momento, Chris empezó a hacer todo lo posible para ayudar a Sydney a tener las fotos perfectas. Hasta agarro una sombrilla para ayudarla a mantenerse seca en el camino adentro. "él la puso sobre Sydney, no sobre sí mismo," dice Johansson. "Estaba tratando de proteger a Sydney y a mí de la lluvia."
Cuando los empleados se dieron cuenta, empezaron a arreglar la iluminación y creando un fondo para hacer su sesión de fotos la mejor experiencia posible. "Diez minutos más tarde regresaron con todos estos signos y comenzaron a colgarlos en la esquina y mover cosas para poder tomar las fotos allí," dice Vallia.
Vallia posteó fotos del acto de nobleza en Facebook, "tenía una sesión de fotos con una senior ayer que por varias razones debió haber sido un desastre; llovió. BASTANTE. Mi senior va a tener una gran cirugía este més entonces no podíamos reprogramar y yo ya estaba en su carro porque habíamos esperado que podíamos escapar la lluvia… Después de entrar, nos recibieron con chocolates calientes."
Aunque estaban un poco aprensivas de pedir un favor, Laura, la mamá de Sydney, luego entró a la tienda y le explicó la situación a Chris, el supervisor de turno, enfatizando que Sydney usa una silla de ruedas, y eso significa que sus opciones de lugares eran más limitadas.
Sin dudarlo un momento, Chris empezó a hacer todo lo posible para ayudar a Sydney a tener las fotos perfectas. Hasta agarro una sombrilla para ayudarla a mantenerse seca en el camino adentro. "él la puso sobre Sydney, no sobre sí mismo," dice Johansson. "Estaba tratando de proteger a Sydney y a mí de la lluvia."
Cuando los empleados se dieron cuenta, empezaron a arreglar la iluminación y creando un fondo para hacer su sesión de fotos la mejor experiencia posible. "Diez minutos más tarde regresaron con todos estos signos y comenzaron a colgarlos en la esquina y mover cosas para poder tomar las fotos allí," dice Vallia.
Vallia posteó fotos del acto de nobleza en Facebook, "tenía una sesión de fotos con una senior ayer que por varias razones debió haber sido un desastre; llovió. BASTANTE. Mi senior va a tener una gran cirugía este més entonces no podíamos reprogramar y yo ya estaba en su carro porque habíamos esperado que podíamos escapar la lluvia… Después de entrar, nos recibieron con chocolates calientes."
Ella luego menciona que Chris les dió todas sus bebidas grátis y no las dejo pagar. También le hizo rótulos y signos a Sydney con marcadores y papel de colores para hacerle un fondo. Reorganizó algunos artículos en la tienda y aún al salir, no las dejó pagar por más café.
"Ha sido un torbellino. No esperas que la gente haga cosas agradables como esas, y acaba de suceder," dice Johansson. "Todos estos destinos se alinearon y me dieron la historia más perfecta para mi hija más perfecta. Y no podría haber pedido algo mejor."
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