El Príncipe Harry y Archie tuvieron bautizos distintos. Meghan Markle optó por una inusual pequeña ceremonia en la iglesia privada de la Reina Isabel en Windsor Castle. Pero algo se mantuvo igual.
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Tal y como la Princesa Diana y el Principe Carlos hicieron en 1984, Meghan y Harry posaron para los retratos oficiales en el famoso sofa verde de Windsor Castle. Según la Royal Collection Trust, el hermoso sofá de caoba formada parte de los muebles del Rey George IV entre los años de 1827 y 1829.
35 años después, el retrato oficial del bautizo del pequeño Archie se realizó en el mismo sofá.
Un dato curioso del sofá es que fue severamente destruido, junto con otros muebles, cuando el Castillo de Windsor se quemó en 1992. Se le agregó nueva tela de seda, para poder ser utilizado nuevamente por la familia Real.