Hace apenas unos días, el secretario general de la ONU, Antonio Guterres, alertó que al ritmo actual, se necesitarán 300 años “ para la igualdad entre hombres y mujeres”.
Es una lucha que lleva más de un siglo, sin embargo la brecha sigue siendo enorme, de ahí que este 8 de Marzo que se conmemora el Día Internacional de la Mujer debemos hacer énfasis en lo que realmente representa esta fecha: la lucha de las mujeres por la igualdad, el reconocimiento y ejercicio efectivo de sus derechos.
Y para no caer en errores comunes y superficiales, te recordamos tres cosas que NO debemos hacer esta fecha. ¡Toma nota!

1. Hacer regalos. Aunque parece obvio, es un error que sigue cometiéndose. Enviar flores, detalles, chocolates o comunicados corporativos de felicitación es un mensaje equivocado. Basta con recordar que esta fecha nos remite al histórico 8 de marzo de 1857, cuando tuvo lugar la primera gran manifestación pública de mujeres obreras textiles en Nueva York. Las trabajadoras de la industria Cotton salieron a la calle para protestar por las miserables condiciones en las que laboraban, demandando la reducción de la jornada laboral a 10 horas y un salario equiparado al de los hombres, entre otros. Fue una de las primeras manifestaciones para luchar por sus derechos. Distintos movimientos, sucesos trágicos y movilizaciones sucederían a partir de entonces. Irónicamente, más de cien años después seguimos alzando la voz por las desigualdades, definitivamente no es un día para felicitaciones.

2. Enviar mensajes triviales y cadenas por redes sociales. El 8 de marzo rememora la lucha por la igualdad de derechos y condiciones sociales, laborales y políticas que las mujeres han exigido desde finales del siglo XIX. Es un día para reflexionar más que para enviar poemas, mensajes románticos o cadenas triviales; una fecha para encontrar la manera de unirse a las luchas de las mujeres en todas partes del mundo.

3. Subestimar la lucha. Si eres mujer, no subestimes la lucha, después de todo, por siglos, muchas feministas dieron su vida para garantizar la justicia, integridad y la libertad de todas las mujeres. Muchos de los privilegios que tenemos ahora se los debemos a las feministas del pasado. Y si eres hombre, evita las bromas pesadas, no seas bravucón, no hagas mofa de la fecha ni le restes fuerza e importancia.