El nuevo Coronavirus no tiene ningún filtro de contagio, cualquier persona puede contraer la enfermedad. Pero, ¿qué hace que el ser obeso sea un factor que eleve las posibilidades de tener un mal pronóstico frente al COVID-19? Los estudios indican que al padecer obesidad la respuesta del cuerpo ante el virus no es la suficientemente potente para combatir las afecciones, desmejorado la salud a tal punto de llevar al paciente a la muerte.
La obesidad
La obesidad es una enfermedad que no sólo empeora este virus; el sobrepeso se relaciona con otras enfermedades como la diabetes, presión arterial alta y algunos tipos de cáncer. La enfermedad es, generalmente, el resultado de una mala alimentación, vida sedentaria, así como también factores hereditarios.  |
Este padecimiento está muy lejos de ser solamente un problema estético. Cambios pequeños en los hábitos diarios como hacer ejercicio y dieta balanceada podrían cambiar el rumbo de una persona con obesidad. Los medicamentos recetados y los procedimientos para bajar de peso son opciones adicionales para tratar la obesidad.
Conoce el Coronavirus
El COVID-19 es un virus miembro de la extensa familia de los Coronavirus, la cual fue recientemente descubierta y ha provocado una contaminación masiva alrededor del mundo. Tanto este nuevo virus como la enfermedad que provoca eran desconocidos antes de que estallara el brote en Wuhan (China) en diciembre de 2019.Relacionados
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Actualmente el COVID‑19 es una pandemia que afecta a muchos países de todo el mundo, explica la OMS. En este virus se presentan una serie de síntomas, los más habituales son la fiebre, la tos seca y el cansancio. Otros menos frecuentes que afectan a algunos pacientes son los dolores y molestias, la congestión nasal, el dolor de cabeza, la conjuntivitis, el dolor de garganta, la diarrea, la pérdida del gusto o el olfato y las erupciones cutáneas o cambios de color en los dedos de las manos o los pies.
