
El padre Hilario Mejía oficio la emotiva ceremonia y entre cantos sacros y hermosas lecturas llenas de amor los declaró marido y mujer. Seguidamente los novios, familiares y amigos continuaron la celebración en San Miguel Dueñas, Antigua Guatemala, en el área de la piscina y recepción en terraza abierta con vista a los volcanes de Antigua, donde los novios bailaron su primera pieza como esposo.

Cada uno de los rincones estaba decorado con una encantadora inspiración vintage-romántica, donde imperaban las veladoras, espejos biselados, lámparas clásicas, mantelería y accesorios florales en colores dorado antiguo y blanco; un escenario donde atendieron y compartieron con sus amigos hasta que el sol apareció.