Lindsay Lohan no puede tener paz. Después de haber terminado con su libertad condicional, la actriz ha estado intentando volver a ser noticia por su talento y no sus problemas legales o financieros.
Tras ser nuevamente host de Saturday Night Live y aparecer en Glee, Lohan se ha concentrado en su próximo proyecto: ser Elizabeth Taylor en el flim para televisión Liz & Dick. La semana pasada te contábamos cómo finalmente había encontrado un Richard Burton que la convenciera luego de rechazar a los primeros candidatos.
Pues ahora resulta que la novedad viene acompañada de una cifra de cinco números bien bronceados…
Según están dando a conocer diferentes sitios de internet, Lindsay le debe 40.000 dólares a un centro de bronceado en Nevada, Estados Unidos.
Tranquilos, no los acumuló en una sola visita sino que es el monto que adeuda desde que comenzó a ir en 2007 hasta 2009.
El local la demandó ante la justicia por falta de pago hace nueve meses, pero en una maniobra legal, quieren presentar la denuncia en California donde reside la actriz.
La razón es para que en caso de que la Justicia lo considere, Lohan tenga que pagar su deuda aunque se niegue a hacerlo. ¿Cómo? Pues con sus propios bienes.
Lindsay, querida, ¿no sería más fácil pagar y ya?
