Príncipe Harry y Megan Markle responden a comentarios de la reina

Continúan las tensiones entre los royals británicos luego de la renuncia de los duques de Sussex, el Príncipe Harry y Megan Markle, a su título nobiliario. En este caso, el conflicto familiar salió nuevamente a flote luego de que el ya icónico matrimonio respondiera a los comentarios realizados por la reina Isabel II a las declaraciones que ambos hicieron en el programa de Oprah y que pintan a la familia real de una muy mala manera.

God save the Queen

La biografía de Megan y Harry, "Finding Freedom", ha sido editada para incluir un nuevo capítulo acerca la entrevista con Oprah Winfrey, el cual fue uno de los momentos televisivos más grande de este año y en sus páginas no dejan muy bien a la soberana británica.

En la entrevista, el matrimonio reveló que entre los miembros de la familia Windsor hubo diversas discusiones acerca de la posible etnicidad del hijo de la pareja, Archie, ya que Megan es una mujer afrodescendiente. Según relataron, había preocupación respecto a este tema porque el nuevo miembro de la familia estaría en la línea directa de sucesión al trono y les preocupaba su color de piel.

Ante estas incendiarias comentarios, la reina respondió a través de un comunicado oficial asegurando que estaban entristecidos por saber la difícil situación que la pareja había vivido pero que, respecto al incidente de la etnicidad de Archie, podían haber "varias versiones" de los hechos.

Los duques responden

En el nuevo capítulo de la biografía se comentó el incidente y el matrimonio no está nada satisfecho con la respuesta de la Familia Real. Según Vanity Fair, ambos consideraron este comentario como decepcionante, aunque "no están nada sorprendidos" de la tibieza con que decidieron abordar el tema. "Meses después, la responsabilidad asumida sigue siendo muy poca", cita el libro a una amiga de Meghan Markle. "¿Cómo puedes seguir adelante como si nada?".

Omid Scobie, coautor de la biografía de la pareja, aseguró a la revista People que desde el palacio de Buckingham se ha hecho muy poco para solucionar los problemas que han distanciado al príncipe Harry de su padre, el príncipe Carlos, y su hermano, el príncipe William. "Creo que él [Harry] está bastante dispuesto a asumir su parte de responsabilidad en todo lo ocurrido. Pero me han dicho que también espera ver que la otra parte haga lo mismo. Y por el momento, eso no ha pasado", comentó Scobie.

La guerra mediática entre ambos bandos no se detiene, y el último encuentro se dio a raíz del nombre de la hija recién nacida de los duques de Sussex, Lilibet Diana. Según el príncipe Harry, él tenía permiso de la reina Isabel de llamar a la pequeña con su apodo familiar. Sin embargo, una fuente cercana a la familia aseguró que esto era mentira. Parece ser que la lucha interna en la familia real no va a detenerse en un futuro cercano.