7 tips para superar el síndrome post vacaciones

Por

Isabel García

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Las vacaciones han terminado y debemos regresar al trabajo. Incorporarnos a la rutina después de un periodo de descanso es más difícil de lo que parece y está comprobado que por lo menos dura dos semanas. Aquí te ofrecemos 7 tips básicos que te ayudarán a incorporarte poco a poco y no morir en el intento de regresar a la oficina.

28/mar 2016

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1. Date tiempo para el regreso: No regreses de tus vacaciones o viaje un día antes de regresar a la oficina o universidad; eso es lo más contraproducente y traumático que puedes hacer. Date tiempo para aclimatarte, organizarte e incluso hasta para organizar tu ropa. Date por lo menos dos días previos de descanso total en la comodidad de tu hogar. La mejor manera de empezar bien es que no estés agotada y para esto debes dejar “descansar tu cuerpo del descanso” para que cierres el “ciclo” de vacaciones con broche de oro.
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3. Ponte metas: Auto-incentivarte es la mejor forma de volver a la normalidad. Ponte metas cortas fáciles de cumplir tanto en casa como en la oficina así volverás a tu disciplina y constancia.
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4. Come lo que debe ser: No sólo pienses en trabajar, sino en desintoxicar tu cuerpo. Recurre a aquellos alimentos que te ayudan a recargar las baterías y que te dan aportes energéticos considerables, como las proteínas, frutas y cualquier alimento que contenga vitamina B: su carencia tiene como final una mala función de la glándula suprarrenal, aquella que permite que la energía se mantenga en nuestro organismo por más tiempo. Alimentos como las uvas, el melocotón, las semillas y los cereales tienen componentes que hacen que el flujo de energía sea mayor.
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5. Duerme todo lo que puedas: Tu mente está congestionada y estresada por el cambio, tu cuerpo también está resentido y se cansará más rápido de lo normal con horarios y actividades diferentes y estrictos. Necesitas recobrar energía y que el cuerpo vuelva a acostumbrarse a ese ritmo de antes. Trata de dormir lo más que puedas en las noches y sobre todo, no llevar el trabajo a la casa.
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6. Más breaks: Aprovecha el poco trajín de muchas oficinas y toma más tiempos de descanso entre labor y labor. Charla con tus compañeros, realiza actividades a las que le saques provecho y que te desestresen, opta por almuerzos prolongados. En pocas palabras, date la oportunidad de tomarte más pausas. Aprovecha los primeros dos fines de semana para descansar como los dioses y llegar lista nuevamente el día lunes.
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7. La cuestión es de actitud, no de horas: Una mentalidad positiva colabora mucho para que no decaigas desde los primeros días. El arranque de un nuevo ciclo es ideal para este fin, ya que tienes nuevas metas, propósitos y sueños por cumplir. Levántate con una sonrisa y no andes pendiente del reloj como si se tratara de una bomba de tiempo; esto solo te producirá más ansiedad.

No te satures de trabajo

No es momento para creerte la mujer maravilla y tratar de hacer todas las labores tú sola o adelantar lo que no hiciste antes de vacaciones. Toma las cosas con calma y pausadamente para no recargarte de tareas, por lo menos, durante la primera semana. Serán unas mini-vacaciones mientras laboras. Si tu horario sigue común y corriente, reparte tareas complicadas para la mañana y lo más sencillo para la tarde.

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