La forma ideal de flamear es colocar en un shot glass la cantidad exacta del licor que se utilizará. Al momento de retirar la cacerola de la estufa agrega el ron del shot, nunca directamente de la botella.
El secreto del chef para esta receta está en el proceso de suavizar el caracol, para lo que utiliza una botella vacía de Champagne, que no rompe la piel ni hace que el caracol pierda su textura. Envuelve el caracol en un filme plástico y golpéalo suavemente con la botella un par de veces.