Después de la misa, el papa se dirigió a la residencia de Fidel Castro, de 89 años, donde ambos sostuvieron 'un encuentro muy familiar, muy informal', de 'unos 30 o 40 minutos'
'Queridos hermanos, faltan ya pocos días para mi viaje a Cuba' y 'con este motivo, deseo enviarles un saludo fraterno antes de encontrarnos personalmente', afirmó el papa en su mensaje previo al viaje que emprenderá mañana ruma a Cuba